martes, 9 de noviembre de 2010

La felicidad de un lector

Hoy, entre el frío, he sudado. La alegría era tal que he sudado. A nadie le importa esto, como tampoco le importa que me he comprado, me he regalado el Anna Karènina (para el que no llegue, está en catalán -por lo del acento-) traducida por Andreu Nin, Eugenia Grandet (por fin en mis manos) y viaje al fin de la noche (años buscando algo parecido a una redición). No se sabe cuándo podré con todo esto, pero ya los tengo en mis manos. Tengo buenas traducciones, el Anna Karènina del ruso, importante si quieres leer algo decente y no una traducción de una traducción de una traducción, cosa que me pasó con el poema épico del Gilgamesh, hasta que llegó a mis manos una edición de Alianza que me rescató. Amigos y amigas, si leeis esto recomendarme libros, por favor. Un abrazo y un saludo cordial. ¡El lector feliz!

No hay comentarios:

Publicar un comentario